El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, y el presidente ejecutivo de Sando, Luis Sánchez Manzano, han inaugurado el busto en el barrio de Santa Cruz
El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha inaugurado, junto con el presidente ejecutivo de Sando, Luis Sánchez Manzano, un busto del Marqués de la Vega Inclán en la plazuela que lleva su nombre en el barrio de Santa Cruz. Sando ha donado esta escultura a la ciudad de Sevilla con motivo del 50 aniversario de la fundación de la empresa. Es una obra del prestigioso escultor Jaime Gil-Arévalo.
Durante el acto de presentación del monumento, José Luis Sanz ha recalcado la labor que esta persona hizo por la ciudad: “Se rinde homenaje en un acto de justicia a una de las personas que, sin ser de Sevilla, más hizo por nuestra ciudad en el pasado siglo XX, el Marqués de la Vega Inclán. Una persona que fue de casi todo en la vida, senador, militar, escritor, intelectual, viajero y, por encima de todo, reformador de la Sevilla de su época. Considerado como el inventor del turismo en España, e iniciador de la red de Paradores, su huella en Sevilla fue inmensa y fundamental para conservar y enriquecer nuestra ciudad”.
En este sentido el alcalde ha señalado la oportunidad de situar esta escultura en el barrio de Barrio de Santa Cruz, ya que lo reformó y le dio la estructura que hoy en día conocemos: “Abrió el barrio a la ciudad con la apertura de la Muralla, creó los Jardines de Murillo, el Paseo de Catalina de Ribera, la Casa de América en el Callejón del Agua o las Hospederías del Barrio de Santa Cruz. Estos son tan sólo unos ejemplos de su inmensa obra”.
Por su parte, Luis Sánchez Manzano ha destacado el compromiso de Sando con Sevilla en los últimos 50 años: “Como agradecimiento a esta gran ciudad, a la que en lo particular me siento orgulloso de ser vecino, desde Sando hemos añadimos un nuevo elemento escultórico en la plazuela del Marqués de la Vega Inclán, contribuyendo así al patrimonio cultural de esta gran ciudad”.
La escultura es obra de uno de los principales escultores sevillanos contemporáneos, el profesor de la Universidad de Sevilla y académico de Santa Isabel de Hungría, Jaime Gil Arévalo.
La figura del Marqués de la Vega Inclán
Benigno de la Vega-Inclán y Flaquer (1858-1942), fue “un sevillano de Valladolid” que revolucionó la España de finales del XIX y de la primera mitad del XX. Contribuyó de manera decisiva a transformar Sevilla tanto en el plano social, como impulsor de las Casas Baratas, como en el plano turístico y urbanizador, pudiéndose recorrer Sevilla a través de su obra.
Contribuyó en el desarrollo de uno de los hitos más importantes de la ciudad: la Exposición Iberoamericana del 29, trajo a Sevilla la estatua del Cid (por encargo de su amigo Archer Huntington, y obra de su esposa, Anne Hyatt), fue promotor del hotel Alfonso XIII, un hotel que sigue siendo el buque insignia del turismo de lujo en Sevilla y en España, realizó obras de arqueología en la Iglesia del Salvador, y fue Alcaide del Real Alcázar, desde dónde realizó una decisiva labor para este monumento con intervenciones de restauración y conservación en las huertas regias y los jardines palatinos, en el Patio del Yeso, colocando la Puerta de Marchena.